sábado, 26 de junio de 2021

Tarta de fresas envuelta en terciopelo blanco

Esta tarta engaña. Parece difícil de hacer, pero no lo es. No tiene truco, solo un molde precioso de la marca Silikomart que, como veis, es de ensueño. Con un poco de maña, y siguiendo las indicaciones del fabricante, dejáis a los comensales con la boca abierta. Además, está tremendamente rica. Aquí os dejo la tarta de fresas envuelta en terciopelo blanco.


Ingredientes:
  • 500 gramos de fresas 
  • 190 gramos de azúcar
  • 400 gramos de nata para montar
  • 6 láminas de gelatina
  • Spray efecto terciopelo blanco
Preparación:

La gracia de esta tarta, indudablemente, es el molde, pero sin él también podéis hacerla y disfrutar de esta delicia aunque sea con otra forma.
Laváis las fresas, les quitáis el rabito, las secáis y las troceáis. Ponéis las hojas de gelatina en un cuenco con agua muy fría. 
Trituráis las fresas hasta que obtengáis un puré fino y reserváis una taza de este puré.
A esta taza le incorporáis las hojas de gelatina escurridas y, con unas varillas, mezcláis hasta que la gelatina se integre y desaparezca por completo.
Vertéis esta mezcla en el puré de fresas, al que le habréis añadido el azúcar, y seguís mezclando para integrar todo.
Batís la nata para montar y la agregáis, con movimientos envolventes, al puré de fresas.
Vertéis la mezcla en el molde y lo metéis en el congelador al menos 4 horas. Mejor de un día para otro.
Cuando esté congelada, la desmoldáis y le aplicáis el spray efecto terciopelo siguiendo las instrucciones del bote.
Si no la vais a comer inmediatamente, la metéis en el frigorífico.


Observaciones
:

Tanto la nata como el bol donde vayáis a batirla tienen que estar muy fríos. Yo meto a ambos en el congelador un rato antes de preparar la tarta.

sábado, 5 de junio de 2021

Adobo para aceitunas de Juan de Altamiras

Con lo que me gusta a mí leer libros de cocina y este de Juan de Altamiras, escrito en 1745, es la caña. La reedición del mismo por parte de la hispanista británica Vicky Hayward me la compré hace años en el desaparecido Círculo de Lectores. La cocina de Altamiras ha sido la nueva propuesta del reto Cooking the Chef que se supera mes a mes. El modesto franciscano aclara al principio de su libro que lo escribió "sin director que me enseñara lo necesario" y además de recetas, se nota que le da mucha importancia a la limpieza, de la que dice: "La exterior es indicio de la interior y en el cocinero la exterior pulcritud del vestido señala la limpieza que guardará en sus manjares y una y otra el cuidado de su conciencia". Menos mal que no coincidió en su cocina con Jamie Oliver, si no, lo hubiese echado al primer día. También destaca que en los cocineros es muy necesaria la paciencia y no le faltaba razón. En su libro titulado "Nuevo Arte de Cocina" hay además, consejos para "los que se quemen o escalden y para templar sartenes". Tras muchas vueltas, me he decidido por aliñar aceitunas siguiendo sus consejos.

Ingredientes:

  • Un kilo de aceitunas picual, arquebina, hojiblanca...
  • Sal
  • Rodajas de limón
  • Hojas de laurel
  • Hojas de olivo
  • Ramas de hinojo
  • Canela
  • Clavos de olor
  • Pimienta negra
  • Azafrán

Preparación:

Esta es la primera vez que aliño aceitunas. Tengo la inmensa suerte de que los padres de mi cuñado Primi encurten todos los años y siempre me mandan varios botes, por lo que mis aperitivos siempre están surtidos de deliciosas aceitunas.

Pero me apetecía probarlas al estilo Altamiras y creo que la maceración va por buen camino.

El cocinero indica que hay que darle, a cada una, "quatro o cinco cuchilladas", ponerlas en agua dulce y mudarles el agua cada dos o tres días hasta que se hundan. En ese momento hay que cambiarles otra vez el agua y ponerles sal. No especifica cuánto tiempo hay que tenerlas así, solo que las saques cuando "hayan tomado el agua y la sal". Con otro día más será suficiente. Una vez escurridas -no tiréis el agua-, las ponéis en una vasija de  medio cántaro, -yo en un tarro de cristal especial para aceitunas- y les añadís: rodajas de limón, hojas de laurel, olivo e hinojo; el agua con sal reservada, un poco de canela, los clavos de olor, pimienta y un poco de azafrán.

Escribe Altamiras que hay que tener cuidado con el adobo de las especias "porque se pone agrio con limones: por eso has de componer pocas de una vez, y acabadas aquellas, compondrás otras del modo dicho: para esto puedes tenerlas todo el año en agua y sal, irás sacando, y componiendo". Advierte que las "aceytunas, después del día que las pones en agua, han de estar cubiertas porque de los contrario se pierden".

Veremos cómo resulta la experiencia.

Observaciones:

Yo no he "acuchillado" las aceitunas. Les he dado un golpe con un martillo.

En este enlace todas las recetas del reto.

El hinojo me lo ha traído mi amiga Luli. ¡Muchas gracias!