domingo, 25 de diciembre de 2016

Turrón de nata y nueces, y FELIZ NAVIDAD

Qué mejor manera de felicitaros la Navidad que con la receta de un turrón de nata y nueces, que está 'delicious' y es sencillísimo. Con cuatro ingredientes está listo. Abajo os la escribo, y lo dicho, pasad felices días, si puede ser, en compañía de las personas que más queréis. 


Ingredientes:
(para dos tabletas)

  • 120 ml de nata (con 35% de grasa)
  • 200 gramos de azúcar glass
  • 200 gramos de almendras molidas
  • 100 gramos de nueces troceadas


Preparación:

Ponéis la nata en un cazo grande al fuego con el azúcar y sin parar de mover lo tenéis unos cinco minutos. ¡Fuego lento! Pasados esos minutos, añadís la almendra molida y las nueces troceadas a mano y los mezcláis hasta que todos los ingredientes estén bien integrados. Y ya está. Así de fácil es hacer un riquísisimo turrón de nata y nueces. Ponéis la mezcla en el molde y dejáis que se enfríe. Si no tenéis un molde específico para hacer turrón os sirve un cartón de leche cortado a la mitad y a lo largo.

Observaciones:

Ninguna, si te gustan la nata y las nueces.







domingo, 18 de diciembre de 2016

Suquet de rape

Fin de semana pasado por agua. Esta noche ha sido horrible y sigue lloviendo... En esta Cartagena o no cae una gota o diluvia. Bueno, pero dejémonos de agua y vamos con la nueva receta. Otro plato para esta Navidad: un guiso de rape que brilla con luz propia.



Ingredientes:
(Para cuatro personas)

  • Una cola de rape de un kilo
  • 300 gramos de almejas gallegas
  • 2 dientes de ajo
  • 100 gramos de tomate frito
  • Un puñado de avellanas
  • Una copa de vino de Jerez
  • 200 ml de caldo de pescado o agua
  • Perejil
  • Sal y pimienta
  • Aceite de oliva

Preparación:


Antes que nada, ponéis las almejas en un cuenco cubiertas de agua y un poco de sal para que suelten la arena.
Cuando compréis el rape, le pedís al pescadero que os dé la cabeza y la espina central para hacer un fumet, y que os corte la cola en trozos. Los salpimentáis.
Peláis los ajos, los sofréis en una sartén con un chorro de aceite de oliva y los ponéis en un mortero junto al perejil picado, las avellanas, el jerez y un poco de agua. Hacéis una picada con esos ingredientes.
Rebozáis los trozos de rape en harina y los freís ligeramente en el aceite de los ajos. Los reserváis.
Añadís el tomate frito a la sartén, la picada del mortero, el caldo del pescado –que habréis hecho con un trozo de la cabeza y la espina– y lo dejáis hervir hasta que se evapore un poco el caldo y quede un salsa. Incorporáis las almejas escurridas y tapáis la sartén. En cuanto se abran las almejas, probáis la salsa, por si le faltase sal, añadís los trozos de rape y le dais un último hervor. 



Observaciones:

Es un plato que podéis tener preparado con antelación, a falta de incorporarle el rape.

No hace falta que sea rape fresco. Venden unas colas congeladas que os pueden servir para elaborar esta receta y quedan también geniales.








domingo, 11 de diciembre de 2016

Quiche de langosta

El menú de Mi caja de recetas para esta Navidad comienza con esta quiche de langosta que ha levantado pasiones en casa y por la que estoy segura os comerán a besos. Es una tarta salada sencilla. Lo más engorroso es sacarle toda la carne a las langostas. Tenéis que probarla. Es una idea diferente para estas fiestas si estáis hartos de los consabidos langostinos.


Ingredientes:
  • 3 langostas de unos 300/ 400 gramos cada una
  • Una cebolla tierna grande
  • Un vaso de vino blanco
  • 200 ml de nata líquida
  • 100 gramos de un queso cremoso
  • 3 cucharadas de tomate frito casero
  • 25 gramos de mantequilla
  • 5 huevos
  • Laurel
  • Sal
Para la masa quebrada:
  • 150 gramos de harina
  • 90 gramos de mantequilla
  • 5 gramos de sal
  • 3 o 4 cucharadas de agua

Preparación:

Ponéis la harina en forma de volcán y colocáis en el centro la mantequilla en cubos pequeños, la sal y el agua y amasáis con las manos hasta que se integren todos los ingredientes y obtengáis una masa ligada. La dejáis reposar una media hora envuelta en papel film en el frigorífico.
Pasado el tiempo, la extendéis con un rodillo y forráis con ella un molde –mejor desmontable– pincháis el fondo con un tenedor y la cocéis a 180 grados en el centro del horno unos 20 minutos. Cuando esté lista la reserváis.
Mientras se hace la base de la quiche, hervís las langostas durante cinco minutos en 200 gramos de agua hirviendo, con una hoja de laurel, un poco de sal y un chorro de vino blanco. Cuando estén cocidas, las retiráis del agua y, una vez frías, las peláis, cortáis las colas en rodajas y sacáis la carne de las cabezas y de las patas.
En una sartén rehogáis la cebolla rallada con la mantequilla y, antes de que tome color, le añadís el vino blanco y lo dejáis cocer hasta que se reduzca a la mitad. Luego añadís la carne de las langostas, el tomate, el queso cremoso rallado, la nata y los huevos batidos. Sazonáis y lo vertéis sobre el molde con la masa quebrada.
Cocéis, también a 180 grados con el horno precalentado, 15 minutos.






Observaciones:

Se sirve templada.

Podéis sustituir las langostas por 3/4 de kilo de gambas y la quiche no desmerece en absoluto.

Si os queréis ahorrar el paso de cocer las langostas, las venden cocidas en algunas pescaderías.

Lo mismo con la masa quebrada. Si no tenéis ganas de hacerla, la compráis ya preparada.

lunes, 5 de diciembre de 2016

Gominolas de boniato y jengibre de los hermanos Torres

Puntual a su cita, como todos los días 5 de cada mes, el reto Cooking the chef ya ha llegado y yo más feliz que unas "Pascuas" porque me lo paso muy bien eligiendo la receta mensual que, en esta ocasión, estaba dedicada a los mediáticos hermanos Torres. Los vi en algunos programas que emitían, hace ya algún tiempo, después de "Un país para comérselo" y sinceramente no me hicieron tilín, pero rebuscando entre sus vídeos me he reconciliado con ellos. De entre las recetas que escogí, creo que la ganadora os va a sorprender: gominolas de boniato y jengibre.


Ingredientes:
  • 500 gramos de boniatos
  • Un trozo de jengibre fresco (20 gramos)
  • 2 cucharadas de miel
  • Azúcar moreno
  • Jengibre en polvo
  • 6 hojas de gelatina


Preparación:

Lo primero que vais a hacer es poner las hojas de gelatina en un bol cubiertas con agua para hidratarlas. Luego, peláis los boinatos y los partís en trozos pequeños. Lo mismo con el jengibre fresco. Ponéis boniatos y jengibre en una olla, los cubrís con agua, les añadís la miel y los cocéis hasta que estén tiernos. Cuando estén cocidos, les pasáis la batidora hasta conseguir un puré.
A ese puré le añadís las hojas de gelatina muy escurridas con la mano y con unas varillas removéis hasta que la gelatina desaparezca.
Ponéis la mezcla en una bandeja de cristal y la tapáis con papel film de manera que éste roce el puré de boniato.
En la foto de abajo lo podéis ver más claro. 
Lo guardáis en el frigorífico 90 minutos o, si no tenéis prisa, de un día para otro.


Cuando esté listo, lo sacáis del molde, lo cortáis en cuadrados de tamaño bocado y los rebozáis en azúcar moreno molido al que habréis añadido una pizca de jengibre también molido.

Observaciones:

En esta ocasión, tengo varios tirones de oreja para los cocineros elegidos:

En los ingredientes, ponen dos boniatos así como si los boniatos fueran todos del mismo tamaño. Por lo tanto, he tenido que hacerlo a ojo para que el peso de la carne de boniato cuadre con las hojas de gelatina.

Un tanto de lo mismo ocurre con el jengibre. Como te descuides, por lo que pican, parece que las gominolas son de guindilla en vez de boniato.

El rebozado de azúcar se deshace enseguida al contacto con la carne de boniato y parecen bañadas en vez de rebozadas.

A pesar de lo anterior, están muy buenas y tienen, cómo veis, un color precioso.



Aquí tenéis el enlace con todas las recetas de los hermanos Torres.



domingo, 4 de diciembre de 2016

Sepia con guisantes

Aquí estoy otro domingo más editando la receta que acabo de cocinar y escuchando el nuevo disco que la cantante lisboeta Carminho ha dedicado a Tom Jobim. Es una maravilla. Fuera hace un día espantoso. No sé si salir a andar o empezar a buscar en mi caja de recetas las propuestas que os voy a sugerir para los días navideños. Lo echaré a cara o cruz. Para empezar el mes de diciembre, ¿qué tal esta sepia con guisantes? 



Ingredientes:
(para tres personas)
  • Una sepia de un kilo
  • 200 gramos de guisantes desgranados
  • 300 gramos de tomates maduros rallados
  • Una cebolla tierna grande
  • Un diente de ajo
  • 1/2 vaso de agua o vino blanco
  • Perejil
  • Aceite
  • Sal y pimienta


Preparación:

Esta es una de esas recetas que se hace todo en la misma olla, sartén, cazuela de barro... y así manchamos poco.
Pues eso, en el cacharro elegido sofreís la cebolla, el ajo y el perejil picados con un buen chorro de aceite de oliva.
Mientras, cortáis la sepia –limpia, por supuesto– en cuadrados o tiras, como más os guste. 
Cuando el sofrito de cebolla esté dorado, le añadís la sepia y la rehogáis durante 10 minutos. Pasado ese tiempo, incorporáis los guisantes, los tomates rallados, el agua o el vino, sal y pimienta, y lo dejáis cocer a fuego medio hasta que la sepia esté tierna y se reduzca la salsa. 
Antes de que termine la cocción, tenéis que probarlo por si tenéis que rectificarlo de sal.
Receta fácil, rica, rápida... que os puede servir para un día navideño.




Observaciones:

Yo he usado guisantes frescos que están en temporada, pero si los ponéis congelados los incorporáis sin descongelar de la misma manera.

Y me voy a tomar la sepia acompañada de este albariño de SOQUM: Gran Novás



domingo, 27 de noviembre de 2016

Solomillos de pollo con salsa de champiñones

Último domingo de noviembre y, pensándolo bien y con lo rápido que pasa el tiempo en un abrir y cerrar de ojos, estamos preparando las recetas de Navidad. Mientras llega ese momento os dejo la nueva receta que os chiflará, si os gustan los hongos y la cocina sin ninguna complicación.


Ingredientes:
  • 500 gramos de solomillos de pollo
  • Una lata de crema de champiñones
  • 250 gramos de setas de cardo
  • 200 ml de nata
  • 2 cucharadas de mostaza
  • Aceite
  • Sal
  • Pimienta

Preparación:

Salpimentáis y salteáis los solomillos de pollo en una sartén con un poco de aceite, los sacáis cuando estén dorados y los reserváis. En la misma sartén ponéis la mostaza, la nata y la crema de champiñones; dais unas vueltas y añadís el pollo. Lo dejáis cocer unos 5 minutos.
En otra sartén salteáis las setas de cardo troceadas con un chorrito de aceite.
Servís los solomillos con las setas por encima.


Observaciones:

Podéis utilizar otras partes del pollo.

Josefa: los crisantemos están como el primer día. ¡Me encantan!

domingo, 20 de noviembre de 2016

Faisán a la crema

¡Mi receta número 200! Y tenía que ser, cómo no, con algún ingrediente muy especial: un faisán recién cazado por el tío Jose para mí y, por supuesto, para todos los "hambrientos" del blog que estáis ahí puntualmente, enfrente del ordenador, cada domingo desde hace 1.275 días. Huelga decir que si no encontráis faisán, podéis hacerla con pollo o codornices. Vamos allá.


Ingredientes
(para 3 ó 4 personas)

  • Un faisán (el mío pesaba 1,2 Kg)
  • 250 gramos de champiñones
  • 2 ramas de apio blanco
  • 2 puerros
  • 100 gramos de mantequilla
  • 3 yemas de huevo
  • 8 cucharadas de aceite
  • 3 cucharadas de nata
  • Sal y pimienta


Preparación:

Laváis las ramas de apio, las secáis y las cortáis en trozos pequeños. Laváis los puerros y cortáis la parte blanca en rodajas finas. Limpiáis los champiñones y los cortáis en láminas o lo compráis laminados.
Salpimentáis el faisán, lo cortáis en trozos y los doráis en una sartén o cazuela grande con la mantequilla y el aceite. Cuando estén dorados los retiráis de la sartén y en la misma grasa rehogáis los champiñones, los puerros y el apio. A los 10 minutos, incorporáis de nuevo el faisán, tapáis la sartén y lo dejáis cocer, a fuego lento, hasta que esté tierno (una hora aproximadamente).
Cuando esté listo, retiráis de nuevo el faisán y trituráis las verduras junto con el jugo de la cocción. A la crema que resulte le añadís las yemas y la nata, la calentáis unos minutos sin que llegue a hervir, rectificáis de sal y, finalmente, se la vertéis al faisán por encima en la fuente en la que vayáis a servirlo.


Observaciones:

Es un plato exquisito que podéis servir acompañado de unas patatas fritas por supuesto caseras.

Las flores de lavanda y de manzanilla me las he traído de mi herbolario favorito de Madrid. Se llama Navarro y vende hierbas aromáticas desde 1771, ¡ahí es nada!





domingo, 13 de noviembre de 2016

Ensalada de zanahoria, champiñones, granada y nueces

Con las estanterías de los supermercados llenas de productos navideños, se me han venido a la cabeza –y al trasero– un quintal de calorías y me he dicho: esta semana ensalada todos los días que se avecinan días muy malos...Y empiezo con esta que es otoñal, completa, vistosa y engaña al estómago con el puñado de nueces y de granos de granada.



Ingredientes:
(para 4 personas)
  • Una bolsa de ensaladas variadas
  • Una zanahoria grande
  • 100 gramos de champiñones marrones
  • Un puñado de granos de granada
  • Un puñado de nueces troceadas
  • Un puñado de brotes de alfalfa
Para el aliño:
  • 4 cucharadas de aceite de oliva
  • 2 cucharadas de zumo de limón
  • Una pizca de sal
  • 2 cucharadas de nueces picadas
  • Una cucharadita de agua

Preparación:

En la fuente en la que vayáis a servir la ensalada, ponéis en primer lugar las lechugas, la zanahoria cortada en tiras con un pelapatatas, los champiñones en láminas, los granos de granada, las nueces y la termináis con los brotes de alfalfa.
Para el aliño, ponéis en un bol todos los ingredientes y batís con un tenedor. Lo repartís por encima de la ensalada a la hora de servirla.



Observaciones:

Esta ensalada crudívora es del libro 'Salad Love' de David Bez.
He cambiado el perejil por los brotes de alfalfa.
Bez ofrece una alternativa vegetariana: añadirle queso de cabra curado, brie o queso azul.




sábado, 5 de noviembre de 2016

Pasta a la amatriciana de Massimo Bottura

Le doy la bienvenida a noviembre con el nuevo reto Cooking the Chef dedicado al cocinero italiano Massimo Bottura. De entre todas las recetas que me han gustado y cumpliendo mis normas de fáciles y riquísimas, creo que he dado en el clavo: pasta a la amatraciana. La receta es una versión de Bottura con vinagre de Módena –originalmente no lleva– que incluye en la carta de su bistró Franceschetta58 en Módena y por el que dona cinco euros a la Cruz Roja cada vez que lo sirve. Es una manera de ayudar a los habitantes de Amatrice, la región italiana devastada por un terromoto el pasado mes de agosto. Os traigo, como él mismo la ha denominado, una receta solidaria.
Y aquí el enlace con todas las aportaciones al reto "Bottura".


Ingredientes:
(Para cinco personas)
  • 500 gramos de pasta mezze maniche (o macarrones)
  • 250 gramos de panceta
  • 2 cebollas
  • Vinagre balsámico tradicional de Módena
  • 70 gramos de queso parmesano reggiano curado 36 meses
  • 120 gramos de pecorino romano
  • 6 tomates medianos
  • 320 gramos de pulpa de tomate

Preparación:

Cortáis la panceta en tiras y la doráis lentamente en una sartén hasta que quede crujiente. Cuando esté lista, la sacáis a un plato con papel absorbente y la reserváis.
En la misma sartén –si tiene mucha grasa de la panceta le quitáis la mitad– doráis las cebollas picadas a fuego lento durante 30 minutos, añadís el vinagre y termináis de cocinarlo con las cebollas a fuego muy suave. Incorporáis los tomates cortados en trozos pequeños y la pulpa de tomate y lo dejáis cocer otros 30 minutos más.
Cuando esté casi listo, añadís la panceta dorada.
Cocéis la pasta con agua abundante ligeramente salada, la sacáis y la ponéis en la sartén junto con el tomate. Añadís el parmesano y el pecorino –si no encontráis pecorino, usáis sólo el parmesano o queso Gouda– y la pasta está lista para servir. Decoráis el plato con un poco más de queso parmesano.



Observaciones:

Massimo Bottura usa guanciale que es una chacina italiana, curada pero no ahumada, preparada con carrillos de cerdo.

Los dos pilares de la cocina de Bottura son el queso parmesano de tres años de curación de la quesería Rosola y el vinagre balsámico de Spilamberto (en la provincia de Módena).


domingo, 30 de octubre de 2016

Flan de coco

A punto de despedir octubre y tenemos todavía en Cartagena un tiempo envidiable que invita a estar en la playa o en el campo y hoy, además, con una hora más –ya está aquí el dichoso cambio que tantos quebraderos de cabeza nos trae– Para después de la comilona dominguera, un flan de coco que es de mis preferidos junto al de manzana.



Ingredientes:
  • 60 gramos de coco rallado
  • Un bote pequeño de leche condensada (370 gramos)
  • 370 ml de leche entera
  • 3 huevos
  • Caramelo líquido

Preparación:

Separáis las claras de las yemas. En el bol de las yemas ponéis la leche condensada, la leche entera y el coco y mezcláis con unas varillas. Batís las claras a punto de nieve y se las añadís a las mezcla de yemas y coco, mezclando con cuidado.
Caramelizáis el molde que vayáis a usar y vertéis la mezcla.
Metéis el molde al baño María en el horno precalentado a 170 grados durante 35 o 40 minutos.
Pasado el tiempo, lo sacáis pero lo dejáis dentro del baño María otros 10 minutos. Luego lo sacáis y dejáis que se enfríe antes de meterlo en el frigorífico.

Observaciones:

Es un postre muy socorrido, sencillo de preparar y que está delicioso si os gusta el coco, claro.





domingo, 23 de octubre de 2016

Caviar manchego

Ya conocéis, por otras entradas, mis raíces manchegas por parte paterna. Y que todas las recetas de esa parte de España que caen en mis manos las hago porque me traen recuerdos familiares inolvidables. La de hoy es precisamente una de ellas: caviar manchego. Os va a encantar. 


Ingredientes: 

  • 300 gramos de tocino salado
  • 300 gramos de magra de cerdo
  • 300 gramos de hígado de cerdo
  • Una cabeza de ajos
  • Una cucharada de pimentón
  • Una pizca de canela
  • Una pizca de pimienta negra
  • Un clavo
  • 2 cucharadas de piñones tostados
  • 1/2 kilo de pan
  • 200 ml de leche
  • Una copita de brandy o coñac (opcional)
  • Sal
  • Aceite para el molde

Preparación:

Pedís al carnicero que os triture el tocino, el hígado y la magra todo junto.
Ponéis el pan a remojo con la leche y tostáis los piñones en una sartén, con mucho cuidado para que no se quemen.
Peláis los ajos y los machacáis junto con el clavo en un mortero.
Ya tenéis todo listo para preparar la masa: en un bol ponéis las carnes trituradas y les añadís los ajos y el clavo, el pimentón, la canela, la pimienta negra y el pan remojado en leche y la mezcláis muy bien. 
En este momento probáis de sal –hay que hacerlo en crudo por el tocino salado. Es la prueba ideal para los amantes del steak tartare– y le añadís el brandy. La tapáis con papel film y la dejáis reposar una hora.
Pasado el tiempo, untáis con aceite un molde y volcáis la masa del "caviar" manchego. Tenéis que cocerlo en el horno a 180 grados al baño María hasta que por encima se forme una costra. Apróximadamente estará listo en una hora. 


Observaciones:

¡Viva La Mancha y su caviar! y ¡vivan mis abuelos manchegos!

Podéis servirlo con una ensalada y una buena hogaza de pan candeal, el preferido de mi padre.


domingo, 16 de octubre de 2016

Grissinis y pan de soda para celebrar el Día Mundial del Pan

Ya que me pongo, me pongo. Y hoy, para celebrar el Día Mundial del Pan, he rebuscado entre mis libros dedicados precisamente al Primer Alimento Natural y he cocinado dos recetas que no tienen ni mucho trabajo ni levados muy pesados ni complicaciones varias: grissinis italianos y un pan de soda llenito de semillas. Ninguno de los dos os va a durar más de un suspiro. Va a ser visto y no visto.







Ingredientes para los grissinis:
(receta de las Hermanas Simili)

  • 500 gramos de harina 00
  • 250/280 ml de agua
  • 15 gramos de levadura fresca
  • 8 gramos de sal (una cucharadita colmada)
  • 50 ml de aceite de oliva virgen extra
  • Una cucharada rasa de malta de cebada (opcional)
  • Semolina de trigo duro  (sémola)


Preparación:

Los grissiniss o colines son irregulares, o sea que nos os preocupéis por cómo os salgan.
Hacéis un volcán con la harina en la encimera o en un bol y ponéis en el centro el resto de ingredientes, los mezcláis y amasáis de 8 a 10 minutos. La masa no debe ser demasiado blanda.
Le dais a la masa una forma alargada y formáis con ella un rectángulo de 30 x 10 cm, manteniendo la forma lo más regular posible.
Pasáis la masa a una bandeja pincelada con aceite de oliva y espolvoreada con semolina. La tapáis con un trapo de cocina de algodón y lo dejáis fermentar una hora.
Pasado el tiempo, cortáis con un cuchillo bien afilado bastones de unos dos centímetros de ancho, los alargáis en la encimera cubierta de harina, los ponéis en una bandeja de horno con papel vegetal y les espolvoreáis un poco de semolina que les va a proporcionar un toque más crujiente. En el horno precalentado a 200 grados los cocéis entre 15 y 18 minutos.



Observaciones:

Son sencillísimos de hacer y quedan geniales servidos con jamón, una tabla de quesos...
Podéis añadir a la masa semillas, pimentón, hierbas... Yo he hecho los más fáciles para animaros a probar. Como dice el mediático panadero Ibán Yarza, "es un momento mágico el proceso de elaborar pan en casa...".



Ingredientes para el pan de soda:
(receta de Ibán Yarza)

  • 245 gramos de harina integral de trigo
  • 105 gramos de harina de fuerza
  • 3 cucharadas de postre de levadura (tipo Royal)
  • De 280 a 300 ml de agua
  • 35 gramos de miel
  • 7 gramos de sal
  • Varias semillas: de lino marrón, girasol, calabaza, sésamo tostado, mijo y amapola.


Preparación:

Para cocinar este pan que no fermenta tenéis que usar harinas sabrosas de buena calidad. Ibán Yarza apuesta por las integrales.
Calentáis el horno a 220 grados. Mezcláis bien todos los ingredientes en un bol con la ayuda de la mano; debéis obtener una masa algo parecida a barro. Cuando la preparación esté homogénea, la vertéis en un molde –si no es antiadherente, le ponéis mantequilla y lo espolvoreáis con harina– y le esparcís harina por la superficie. Lo horneáis 40 minutos. Si se dora mucho, le ponéis papel de aluminio por encima. Una vez transcurrido el tiempo de cocción, lo sacáis del molde para que asiente y se enfríe un poco. 



Observaciones:

Está delicioso con mantequilla o queso.
Yo he reducido un poco la cantidad de agua y lo he hecho sin molde. Una hogaza redonda en la que he practicado dos cortes en cruz para llegar a la base del pan, de manera que luego se pueda romper con la mano en cuñas.



miércoles, 5 de octubre de 2016

Bocatas de huevo de caserío de Eneko Atxa

Ha llegado por fin el nuevo reto de Cooking the Chef. Tenía ya unas ganas... y eso que me sumé a la repesca de agosto con la frittata de calabacín de Joan Roca. El cocinero elegido tiene un establecimiento de ensueño, Azurmendi, que fue elegido mejor restaurante de Europa el año pasado y tiene tres estrellas Michelín. Ya habréis adivinado que se trata de Eneko Atxa. De entre sus fantásticas recetas he elegido una sencilla, pero que está riquísimaaa y eso que no he encontrado la papada adobada con la que él la hace. Pero como da más opciones, la he cambiado por un tocino entreverado, cortado muy fino, que está de muerte. Allá voy con los bocatas de huevo de caserío al estilo Atxa que, os aviso, son de dos bocados.



Ingredientes:
(Para 12 bocatas)
  • 12 huevos
  • Pan que no esté muy cocido
  • 100 gramos de tocino cortado muy fino
  • Sal

Preparación:

Como cortar muy fino el pan en casa es muy complicado si no tenéis un cortafiambres, he preparado los bocatas con rebanadas pan de molde -uno que venden especial: enrollado-  y les he pasado un rodillo para dejarlo lo más fino posible sin que se rompa.
Cortáis las rebanadas en tres tiras, a la medida de las del tocino, y se las ponéis por encima.
Las cruzáis de dos en dos y en el centro ponéis una yema de huevo. Cerráis las dos tiras con mucho cuidado de no romper la yema y las vais dejando en una bandeja de horno con papel vegetal. En dos minutos, con el horno a 250 grados, estarán listas. 





Observaciones:

Aunque el pan se vea blanco, queda muy crujiente.

Si se os rompe alguna yema, hacéis una tortilla. A mí se me ha roto una.

Guardad las claras para montar un merengue. 



Aquí tenéis el enlace con la receta de Eneko Atxa y en este otro todas las recetas que se han presentado al reto de septiembre

domingo, 2 de octubre de 2016

Galletas de avena, naranja y nueces

No tenía pensado publicar una receta dulce este domingo, pero esta semana he estado "galleteando" varias tardes y las galletas de naranja y nueces han salido tan requetebuenas que voy a compartirlas con los "hambrientos" de Mi caja de recetas. Las próximas serán las de avena, coco y chocolate.
Lo bueno de estas galletas es que para hacerlas no necesitáis ningún aparato de cocina. Las manos y ya está.




Ingredientes:
(Para unas 36 galletas)

  • 200 gramos de copos de avena
  • 100 gramos de harina integral
  • 100 gramos de azúcar moreno
  • Una naranja
  • Un huevo 
  • 1/2 cucharadita de levadura
  • 100 ml de aceite de oliva que no sea de sabor muy fuerte
  • 2 cucharadas de miel
  • 100 gramos de nueces picadas y un puñado sin picar para adornar las galletas
  • Sal


Preparación:

Laváis la naranja, le ralláis la piel, la exprimís y reserváis el jugo.
En un bol grande mezcláis la ralladura de naranja, los copos de avena, la harina integral, el azúcar moreno, la levadura, las nueces picadas y una pizca de sal. Cuando estén bien mezclados los ingredientes, le añadís el huevo a temperatura ambiente, el aceite, el zumo de la naranja y la miel y seguís mezclando, hasta conseguir una masa compacta.
Precalentáis el horno a 180 grados con calor arriba y abajo.
Cogéis porciones de masa con las manos y hacéis unas pequeñas bolas. Las vais poniendo en la bandeja del horno con papel vegetal, las chafáis un poco con los dedos y le ponéis media nuez enmedio apretando un poco.
Dependiendo del tamaño, en 12 o 15 minutos estarán doradas y listas. Tenéis que echarles una ojeada para que no se tuesten demasiado.
¡Huelen y saben de maravilla!



Observaciones:

Si no tenéis harina integral, usáis la que tengáis en casa.

Metidas en una caja de lata tenéis un regalo estupendo: unas galletas caseras y una caja que se queda en casa para meter cualquier otro dulce.