Las chicas de Cooking the Chef nos han invitado a dar un largo paseo por la gastronomía de la Edad Media y está resultando un auténtico placer además de todo lo que, en mi caso, estoy aprendiendo. Este mes viajamos a Francia con el libro Le viandier escrito por Guillaume Tirel "maistre queux du Roy de France" alias Taillevent entre los años 1340 y 1395. No se sabe la fecha con exactitud. He ojeado la traducción que del manuscrito hizo el Vaticano y que está en la Universidad de Marburg, y es muy curioso el manuscrito original que se conserva en la Biblioteca Nacional de Francia que está escrito en francés medieval sobre pergamino. De este no me he enterado de nada jajajaja. Este mes he tenido que poner la imaginación a trabajar porque las recetas vienen sin cantidades y con las explicaciones no muy allá pero bueno, en la página XXXI de unas las de traducciones habla de flanes y flaons y por estos últimos me he tirado en plancha. A por ellos. Le he cambiado el rebozado de azúcar y canela por azúcar glas.
En este enlace, el resto de recetas del reto.
Ingredientes:
(Con estas cantidades me han salido 23 flaons)
- 500 gramos de harina
- 150 gramos de manteca de cerdo
- 150 gramos de azúcar
- 2 yemas de huevo
- 37,5 ml de zumo de naranja
- 37,5 ml de vino Moscatel
- 20 ml de aceite de oliva
Para el relleno:
- 125 gramos de requesón
- 50 gramos de almendra en polvo
- 2 cucharadas de azúcar
- Una cucharada de canela
Además, crema de chocolate, dulce de leche y cabello de ángel.
Preparación:
Son facilísimos de hacer y la masa se trabaja estupendamente con un poco de reposo. Precalentáis el horno a 180 grados. En un bol mezcláis el azúcar, el zumo de naranja, el vino y el aceite. Le añadís las yemas de los huevos, la manteca y la harina poco a poco y amasáis hasta que consigáis una masa muy bien integrada y que no se pegue a las manos.
La dejáis reposar una media hora. Vais a necesitar un plástico para darle forma a las empanadillas y que nos se peguen. Yo utilizo una bolsa de Ikea abierta. En el centro ponéis un bola de masa del tamaño de una mandarina, la cubrís con el plástico y con un rodillo amasáis hasta que se extienda. Le ponéis en el centro una cucharilla del relleno y con la ayuda del plástico la cerráis. Y ahora, la selláis con un tenedor o con un molde de hacer galletas.
Las vais dejando en una bandeja de horno que habréis forrado o con papel vegetal o con una lámina de silicona y las tenéis cociendo unos 15 minutos o hasta que veáis que se empiezan a dorar.
Las sacáis a una rejilla y cuando se enfríen las cubrís de azúcar glas.
Observaciones:
El relleno original de los flaons es de requesón pero como la masa admite cualquier otro, he hecho además, cuatro de crema de chocolate que he congelado previamente para que quede perfecta al meterla en el horno, otros cuatro de cabello de ángel y tres de dulce de leche.